Sin embargo, aquí es donde la industria del (re)aseguro está preparada”, detalla A.M. Best en su informe ‘Global Reinsurance — Where Have All the Losses Gone?’. Thomas Caldecot de CHUBB, explica que "si no hubiera pérdidas, no habría primas". “La industria ayuda a la gente y a las empresas con el proceso de reconstrucción”, reflexina el directivo.
Históricamente, los reaseguradores han desempeñado un papel significativo en la recuperación de los eventos catastróficos. En los últimos cinco años, los mercados de capitales han asumido un papel más importante en este proceso en forma de "capital alternativo". Basado en la supervisión de los reaseguradores globales por parte de A. M. Best, parece que el capital alternativo ha desempeñado un papel significativo en la mitigación del impacto neto de pérdidas de esta serie de eventos extremos, principalmente en forma de reaseguro colateralizado.
A partir de los datos de los reaseguradores globales calificados, la agencia perfila una posible gama de resultados para evaluar, entre otros componentes, cómo se verían los resultados de suscripción, las ganancias netas y el rendimiento del capital social durante el último año. El análisis ha sido y seguirá siendo revisado a medida que se disponga de más información.
Pérdidas de Harvey, Irma y María ¿quién tiene razón?
Los huracanes Harvey, Irma y María, junto con el terremoto del centro de México, ha supuesto para el sector, en promedio, unas pérdidas acumuladas de aproximadamente unos 90.000 millones de dólares. Esto está muy por debajo de algunas de las cifras de pérdidas que se han difundido previamente.
Así que esto lleva a una pregunta ¿quién tiene razón? “Usando la historia como lección, no es raro que las pérdidas relacionadas con los eventos catastróficos se desarrollen de manera adversa con el tiempo y la complejidad de la pérdida suele ser un factor determinante a este respecto. Dada la complejidad de los eventos del huracán, no sería sorprendente que las pérdidas se incrementen hasta bien entrado el próximo año", se indica.
"Usando los 90.000 millones reportados como punto de partida, nuestras encuestas completas indican que las pérdidas netas acumuladas por catástrofes para las compañías de reaseguro están entre 20.000 y 25.000 millones. Estimamos que las compañías primarias retuvieron alrededor de la mitad de los 90.000 millones de dólares, lo que deja aproximadamente entre los 20.000 y 25.000 millones de dólares de pérdidas destinadas a capital alternativo, la mayoría en forma de garantías retroactivas", se concreta en el informe.
Según la agencia, además, el impacto de las pérdidas netas acumuladas por catástrofes como porcentaje del patrimonio neto al cierre del ejercicio 2016 para el conjunto de las reaseguradoras globales osciló entre el 15% en el lado más alto y menos del 1% en el extremo bajo. La mediana fue de aproximadamente del 8%.
"Se necesitarán aproximadamente 5 trimestres para recuperar lo que se ha pagado. Es cierto que la mejora de los tipos de interés puede acelerar este plazo, pero algunas compañías pueden tardar más de 2 o 3 años en recuperar estas pérdidas".
A. M. Best mantiene una perspectiva negativa en el sector del reaseguro. Esta perspectiva se ha visto impulsada principalmente por el perfil de beneficios del sector y las presiones competitivas del mercado. "Nuestra opinión -revela la agencia- siempre ha sido que el capital ajustado al riesgo para el sector ha sido fuerte. Una opinión que sigue siendo válida". Y subraya: “Hasta ahora, los datos no han sido sorprendentes y no ha habido cambios en la calificación de las reaseguradoras como resultado de estos siniestros”.
“Aunque algunas compañías pueden perder una cantidad nominal de capital durante este año, no será un agotamiento significativo de capital como para ser ser problemático o perturbador para el mercado. Una vez más, nuestra preocupación es que el perfil y la tendencia de las ganancias sigue siendo tensa y que 2017 tendrá un peso en la rentabilidad media de los próximos cinco años sobre el patrimonio neto”, concluye.